Final Fantasy XIV: Heavensward

Después de un inicio un tanto problemático, Final Fantasy XIV se ha convertido en uno de los MMO más interesantes que hay en el mercado, con una muy buena cantidad de contenido que mantiene a los fans de la saga y este tipo de juegos, entretenidos por varias horas. Por ello, no es de extrañar que Square-Enix haya liberado una expansión para su exitoso título, la cual no sólo agrega un par de cosas; literalmente, es un juego nuevo.

Final Fantasy XIV: Heavensward nos pone exactamente después de los eventos de A Real Reborn, donde por diversas razones, nuestro personaje tiene que huir a las tierras de Ishgard para su seguridad; lamentablemente, dicho lugar está inmerso en un conflicto conocido como la "Dragonsong War" Lo primero que damos cuenta al llegar a este nuevo territorio, es su tamaño, pues es incluso más grande que todo A Realm Reborn; debido a que ahora no sólo nos deplazamos por tierra, los cielos también serán nuestro lugar de aventuras.

Así es, una de las características principales de esta expansión es la posibilidad de volar y explorar distintos lugares a los que sólo se accede por esta vía. No te preocupes, aunque necesitarás de hacer un par de misiones para abrir las "rutas aereas"; no es algo muy complicado y cuando las hayas completado, de manera inmediata contarás con tu primer "vehículo volador", claro que si deseas alguna montura o transporte más impactante, deberás de invertir un poco más de tiempo.

Asimismo, fueron agregadas tres nuevas clases: Dark Knight, que posee un ataque una resistencia impresionantes, es un nuevo tanque; Astrologian, que basa sus habilidades en un mazo mágico de cartas, hace las veces de sanador;  y el Machinist, el cual hace ataques a distancia, aunque su función no está muy bien determinada. Algo interesante es que no necesitarás hacer algo especial para poder adquirir uno de estos nuevos "trabajos", con que hables con el jefe del gremio que más te llame la atención será suficiente. A lo anterior, suma una nueva raza, los Au Ra, los cuales parecen humanos con características de dragón, aunque en la historia te mencionan que poco tienen que ver con los grandes reptiles.

Claro está, todo esto se ve aderezado con más misiones, equipamento, items, misiones secundarias, Primals y la esperada incursión en Alexander, misma que será liberada en el futuro próximo.

Si bien la experiencia de Heavensward es satisfactoria, hay un par de cosas que no la dejan brillar del todo. La primera es que forzosamente necesitas haber terminado la historia de A Real Reborn para acceder al nuevo contenido; otra es que varias de las adiciones se limitan al territorio de Ishgard, siendo lo más evidente que no podrás volar fuera de este lugar; además del poco balance que tienen las nuevas clases, mientras que el Dark Knight y Astrologian fundamentan su introducción al juego con movimientos y habilidades últiles, Machinist no cuenta con muchas ventajas reales, pues no cumple con los requisitos mínimos para tener un papel importante dentro de un equipo (recordemos que, a pesar de todo, este es un multijugador cooperativo). 

Todo esto, sin mencionar que no hubo un gran avance técnico real; si bien se crearon nuevos escenarios y música para el título, el salto gráfico y sonoro no es casi imperceptible.

Si eres fan de Final Fantasy, recurrente de A Realm Reborn o asiduo a los MMO; Heavensward no te decepcionará, agrega mucho a la experiencia previa de esta entrega número 14 de la saga, con la promesa de tener mucho más contenido en el futuro, lo que te asegura horas de diversión. Sin embargo, si es tu primera incursión en el juego o te aburres muy fácil con los títulos masivos; te recomendamos que los pienses detenidamente antes de adquirir la expansión, pues necesitarás mucha paciencia y decenas de horas para poder montar tu primer dragón o chocobo.